top of page
Posts Destacados 

¿Se debería legalizar la eutanasia en Chile?

  • Natalia Zamorano
  • 1 ago 2017
  • 6 Min. de lectura



“Mejor vida es morir, que vivir muerto” – Francisco Quevedo.


La muerte es un proceso por el cual todos tenemos que pasar, es inevitable. A muchas personas les asusta, para otras es simplemente un paso más, y para otras es un regalo. Entre este último grupo de personas se encuentran algunos de los pacientes terminales, quienes desean la muerte, como una manera de salir de su sufrimiento constante. La solución para estas personas es la eutanasia.

La eutanasia es un proceso indoloro por el cual se acelera la muerte de una persona, con el único fin de terminar con el sufrimiento del paciente y provocarle una muerte digna. En este contexto se entiende que la muerte digna es la que llega después de que el cuerpo ya no puede funcionar por sus propios medios, por lo que una vez que el paciente está desahuciado resulta natural morir, evitando semanas o meses de sufrimiento extremo por considerar que la muerte en estas circunstancias es más digna que la agonía, y así acortar la dolorosa espera. Por lo tanto, ¿estamos hablando de la vida o de alargar la agonía? ¿Estamos hablando del bienestar del paciente o del egoísmo de mantener a alguien con vida a pesar de que la naturaleza dice lo contrario?


El médico o doctor es la persona que nos ayuda recuperarnos tras una enfermedad. Sin embargo, su oficio no consiste únicamente en restablecer la salud, sino también en aliviar dolores y sufrimientos que acompañan las enfermedades, y ello no tan solo en el alivio del dolor, sino también a fin de procurar al enfermo, cuando no haya más esperanzas, una muerte dulce y apacible, porque en estos casos la eutanasia no es una parte menor de la felicidad.

Además, según el Código Internacional de Ética Médica el médico debe “considerar lo mejor para el paciente cuando preste atención médica”, y si un paciente está en estado terminal, sufriendo y sin esperanzas de mantenerse con vida, ¿no es lo mejor para él poner fin a su sufrimiento mediante la eutanasia?


Por otra parte, creo que cada persona es independiente, y por lo tanto puede decidir sobre su vida y qué hacer con ella, siempre y cuando esté sano mentalmente y en condiciones para decidir, porque ¿quién mejor que uno mismo para poder tomar una decisión sobre su propia vida? Solo uno puede saber hasta cuándo puede resistir, solo uno puede saber que tanto dolor siente, porque no hay nadie que sepa más sobre cómo te sientes que tú mismo.

Toda persona tiene derecho al uso de su libertad y autonomía individual (Derechos civiles y políticos, ONU), es decir a decidir y tomar decisiones por su cuenta sin la necesidad de depender de otro. Por lo tanto, si una persona decide morir porque se considera incapaz de tolerar el dolor provocado por su enfermedad, debemos respetar su decisión.

Sin embargo, ello no se debe malinterpretar, el respetar la voluntad de las personas que desean recurrir a la eutanasia no significa el no respetar la voluntad de las personas que no la desean, simplemente se estarán dando más opciones. Por ejemplo: Los alumnos de 4to medio deben dar la Prueba de Selección Universitaria, donde el puntaje máximo es 850 puntos. Un alumno que obtiene el máximo de puntaje en ella no está obligado estudiar medicina, simplemente sabrá que puede hacerlo si quiere. Sin embargo, si el alumno obtiene 500 puntos sabrá que NO puede estudiar medicina.

Esta misma situación se aplica a la eutanasia, el legalizarla no obliga a practicarla, solo te da la opción de hacerlo si así lo deseas.


Es de conocimiento público que los tratamientos y cuidados de los pacientes en estado terminal son de un altísimo costo, por ejemplo, el tratamiento de un cáncer de pulmón en estado terminal puede llegar a costar desde $60 millones hasta $200 millones, según un estudio realizado por Alfredo Molina, académico de la Universidad Diego Portales.

La razón de los precios elevados de estos tratamientos es que los medicamentos para estas enfermedades son muy difíciles (y por lo tanto costosos) de fabricar, y debido a que las personas que padecen estas enfermedades son minoría, todo el costo recae sobre ellas.

En el estudio antes mencionado se estima que el precio de fabricar estos medicamentos supera los US $1000 millones, y que por lo tanto el costo del tratamiento es de $10 millones mensuales aproximadamente.

Por lo tanto, ¿no sería más conveniente permitir que los pacientes que se encuentran en este estado puedan acabar con su sufrimiento si así lo desean? Esta mirada puede parecer fría para muchas personas, ya que se puede prestar a malinterpretaciones. Sin embargo, la verdad es muy simple: si una persona en estado terminal no tiene intenciones de seguir viviendo y de seguir pagando una gran cantidad de dinero con el conocimiento de que su enfermedad no tiene cura, ¿no sería mejor concederle su deseo y así que la familia del enfermo pueda ahorrar ese dinero y el hospital pueda ahorrar esos medicamentos para otro paciente que sí tenga oportunidades de seguir viviendo?


Una de las principales razones por la cual un paciente terminal solicita la eutanasia es el dolor, porque como todos sabemos este tipo de enfermedades trae consigo una gran variedad de dolores inimaginables, que muchas veces los pacientes no se creen capaces de soportar. Probablemente mucha gente que está en contra de la eutanasia no conozca realmente los dolores que los pacientes puedan llegar a experimentar, y por esta razón es fácil estar en desacuerdo si no se ha estado realmente en la situación de padecer un dolor tan grande como para desear acabar con su vida. Por lo tanto aquí hay algunas evidencias que demuestran el dolor que sufren los pacientes en estado terminal:


• Según la Escuela de Medicina de la P. Universidad Católica, el 60% de los pacientes que padecen de cáncer sienten dolores moderados o intensos, “constituyendo el principal temor manifestado por ellos y por sus familiares. Si bien el número total de pacientes con dolor por cáncer o síndromes relacionado constituye menos del 5% de la población con dolor agudo o crónico, el dolor canceroso tiene un significado muy especial para los pacientes y sus familias. (…) En el dolor por cáncer, la connotación que le confiere la etiología de pronóstico incierto y la expectativa de que se seguirá presentando, hace que la percepción y el sufrimiento que desencadena sea cuantitativa y cualitativamente diferente a la de un dolor agudo benigno”.


• Según el estudio SUPPORT (A Study to Understand Prognosis and Preferences for Outcome and Risks of Treatment) y el estudio de Stefan Weiss, un 50% de los pacientes en estado terminal experimentan un dolor agudo en sus últimas semanas de vida.


• Y finalmente según la Revista Médica General Integral, los pacientes en estado terminal “sufren un dolor crónico, permanente y estable. (…) junto con incrementos agudos e intermitentes en el nivel del dolor, que se presentan hasta en el 86 % de estos enfermos.”



Hay muchas personas que piensan que la eutanasia es un homicidio con otro nombre, ya que no es más que un hombre dando muerte a otro. Sin embargo, en mi opinión, es un acto humano, ya que al permitirle a alguien morir dignamente con el tiempo suficiente para que se despida de su familia y seres queridos, se está mostrando humanidad, no frialdad.

Toda persona merece tanto una vida como una muerte digna, y este es el principal objetivo de la eutanasia: provocar una buena muerte, de hecho ese es exactamente el significado de la palabra <buena muerte> (del griego “eu" y "thanatos”).

Además en el párrafo 6, del artículo 16, de los Derechos y Deberes de los Pacientes se señala que: “Las personas que se encuentren en estado terminal, tendrán derecho a vivir dignamente hasta el momento de su muerte”. Y como ya mencioné en un principio, una vida llena de sufrimientos no es vida, ni mucho menos una vida digna.


Por lo tanto se entiende que la eutanasia es un método válido para acabar con el sufrimiento de pacientes en estado terminal, ya que les provoca una muerte digna y libre de sufrimientos.


Y finalmente, ahora que se conoce toda la información, me gustaría que se volvieran a formular las preguntas que hice en un principio: ¿Estamos hablando de la vida o de alargar la agonía? ¿Estamos hablando del bienestar del paciente o del egoísmo de mantener a alguien con vida a pesar de que la naturaleza dice lo contrario?



Comments


Posts Recientes 
Encuéntrame en:
  • Facebook Long Shadow
  • Twitter Long Shadow
  • YouTube Long Shadow
  • Instagram Long Shadow
Other Favotite PR Blogs

Enlace externo. Edita aquí.

Enlace externo. Edita aquí.

Enlace externo. Edita aquí.

Enlace externo. Edita aquí.

Búsqueda por Tags

© 2017 por PVCN. Creado con Wix.com

  • Facebook Clean Grey
  • Instagram Clean Grey
  • Twitter Clean Grey
  • YouTube Clean Grey
bottom of page